martes, 16 de junio de 2009

Felicidad?



Vivimos anhelando una serie de hitos, objetivos vitales, cada uno con los suyos, o más que con los suyos, con los de su madre, padre, familia, escuela, grupo de amigos, periódico que lea, o canal que prefiera…Estos hitos suelen ser de lo más mundano y tópico, y se asemejan al cuento de hadas moderno, al tradicionalismo más puro en cuanto a vida occidental: salud, amor, trabajo (u ocupación) y dinero. Obviamente existen infinidad de peculiaridades y ramificaciones, pero creo que las puedo resumir en estas cuatro.
Pues bien, qué pasa cuando, este ser extraño al que llamamos humano, se le plantan las cuatro categorías a un nivel aceptablemente inaudito, digamos que: salud estándar, pareja y buena relación con sus semejantes, trabajo óptimo que distrae y da para comer y la posibilidad de irse de vacaciones o de hacer un regalo a los que le rodean. Qué pasa con este sujeto? Creéis que dirá: “..ay si por fin, ya tengo todo lo que necesito y anhelo, no se puede pedir más, SOY feliz..”.
La respuesta es NO.
Porque somos incapaces de que el sentimiento de felicidad que a veces nos embarga, ese que te hace suspirar, cuando te quedas con los músculos relajados y sí que hay un momento de: joder que bien… Porque no puede perdurar? Se va tan rápido, supongo que por eso se disfruta tanto, es un conjunto de sensaciones y emociones que cuando se juntan todas…parece que no se puede pedir más por un instante, en ese instante…y luego vuelta a la búsqueda, al anhelo…
Y hay otra cosa, aún más absurda y más humana a la vez (como tiene que ser), cuando estamos aparentemente “cubiertos” surge el miedo, si,si el miedo…Es esa angustia ese vacío aparente que te hace cuestionar: “…algo tiene que ir mal, esto no es normal…” ya que si por un lado nos cuesta retener la sensación de júbilo y “completismo” cuando lo conseguimos va y no nos basta, porque no nos creemos que sea cierto, que lo tengamos todo, lo que deseábamos, lo que soñábamos y no teníamos…
Y es que en verdad, cuando tenemos el primer escalafón cumplido, aunque siempre habíamos pensado que al tenerlo, todo se solucionaría, surgen nuevos y aún más mundanos problemas…
Quien tiene la fórmula, el pensamiento, el razonamiento, la lógica para poder sobrellevar la vida, para poder disfrutar bien de las cosas, aprender a bajar rápido de la parra para volver a estar en el camino y que nada se nos pase por alto. Aprender a ser felices, adaptados tranquilos, funcionales….que cambie ya el tiempo, que me hierve el cerebro.